La protesta del gallinero: Cuando se adormece la mirada
¿Es posible soñar en este gallinero?
Un tiempo fui soñadora, tenía grandes metas y anhelos.
Soñaba con conquistar y transformar.
Hoy soy un conjunto de tareas y cumplimientos, no tengo tiempo ni sueños.
Soy como una gallina que ha de poner su huevo diario.
Me evalúan como a una ponedora: nunca por el huevo de ayer,
siempre por el de hoy, grande y constante.
He visto a algunos con grandes cacareos
Creyeron defenderse con gritar y discursear.
Al fin terminaron en la olla por ponedores mentirosos.
Hemos convertido la ciudad en un gigantesco gallinero
Somos ponedores de mirada nostálgica, adormecida por los recuerdos,
insensibles a los gritos de nuestra historia.
¿Dónde están los soñadores de los ‘60?
¿Convertidos en gerentes y dueños de grandes gallineros?
¿Trasladándose en helicópteros hacia sus doradas oficinas?
¿Dónde están los políticos y revolucionarios de los ‘70?
¿Comprando sus zapatos en Nueva York,
vendiendo libros comunicacionales o siendo samuráis y guerreros en el senado?
¿Estarán creando nuevos “referentes” políticos adaptados a sus locas ansias de poder?
¿Atacando irracionalmente todo lo que venga de un partido o de una postura distinta?
¿Por qué nuestra mirada se ha adormecido, aburguesado,
tiranizado por el presente y la productividad?
¿Por qué cuesta tanto el trabajo?
¿Por qué cuesta tanto poner estos huevos diarios?
¿Por qué hacemos tan grande y doloroso el trabajo?
El señor del gallinero inventó un conjunto de condiciones para vivir en el gallinero. Inicialmente no dijo nada, simplemente cuidaba que se cumplieran. Luego las transformó en un rito de iniciación, que se entregaba a todos quienes cumplían este credo plumífero:
- Como toda gallina de verdad, creemos solamente en lo concreto, observable y cuantificable.
Esto es lo que finalmente vale.
- Más vale un gramo de trigo en el pescuezo, que cien sueños en el aire.
- Creemos que vivimos tiempos de competitividad. ¿Por qué entonces ceder tu espacio a
otros?
- Estamos aquí para tener éxito y el éxito radica en ganar a otros, ser mejor que otros,
vencer a otros.
- No te alarmes por la compulsividad que puede surgir en ti para adquirir, comprar,
poseer (cosas, contactos, poder, amigos, amores…).
- Una vida se justifica en la medida en que cada uno llena su granero hasta reventar.
- Sin tus posesiones no puedes ser tú. Serás simplemente un perdedor, corriendo
riesgos, amenazado por el fracaso, viviendo en la incertidumbre e inseguridad de una precaria jubilación. Juega con acciones: ése debe ser tu mayor sueño de futuro.
- No tengas miedo, o al menos nunca lo demuestres, es signo de las mentes débiles,
timoratas, inseguras. La agresividad te salva y te lanza al estrellato, al éxito que te mereces.
- Entiende que tener y alcanzar el éxito te traerá reconocimiento y seguridad: te has
ganado un lugar importante en el grupo.
- Haz lo que quieras, piensa en que todo lo que deseas, es necesario para tu felicidad, por chocante que sea. No temas a la crítica, haz lo necesario y más allá para ser feliz… la felicidad personal no puede tener límites ni restricciones.
- No tengas remordimientos de nada. Los remordimientos los inventaron algunos para
impedirte que llegues al éxito que ellos obtuvieron antes que tú.
- Solo los flojos y pusilánimes no logran alcanzar el éxito, el poder y la riqueza.
¿Los pobres?... Siempre lo serán. ¿Por qué preocuparse? La pobreza les colonizó
la cabeza, no tienen vuelta, déjalos, ellos verán qué pasa con su vida.
- La vida te ofrece dos puertas: una para ovejas, otra para leones ¿Cuál eliges? Si te equivocas, te comen. ¿No es mejor comer, que ser comido?
- Los leones nos enseñan que es necesaria una dosis de agresividad para sobrevivir y reinar. Las ovejas lo único que pueden mostrar es su rebaño y un largo camino lleno de bolitas…
- ¿Quieres controlar o ser controlado? ¿Oveja o león? Es tu decisión ser perdedor...
- Si te decides a tener mente de león en cuerpo de gallina, el futuro, con toda seguridad, será tuyo. Iras tan lejos, que te darás cuenta de que nadie te acompaña, pero en la vida no se puede lograr todo… Éxito y soledad o fracaso y amigos… elige.
- Si cumples este credo, podrás recibir el rito iniciático, podrás disfrutar de tiempos mejores, serás parte de una civilización nueva, lejos de las gallinas. Serás quien se come a las gallinas, tendrás mucho dinero, éxito, fama y mucha soledad… Pero en la vida no se puede lograr todo…
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