¿Quién gobierna en Europa? Debate del último Seminario ÉTNOR con J. Ignacio Torreblanca

[Fundación ÉTNOR]

 

“Cuando un profesor de política necesita 170 páginas para responder a la pregunta de quién gobierna Europa es que algo va mal” reflexionaba ayer José Ignacio Torreblanca, Director en Madrid del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, haciendo clara mención a su último libro publicado recientemente ¿Quién gobierna en Europa?.

 

Para el ponente, que acudió por segunda vez al Seminario de la Fundacion ÉTNOR de ética económica y empresarial, esta crisis nos ha servido para adquirir conciencia “de que tenemos un problema de gobernanza” que nos ha hecho “despertar sobre el significado y sentido de la democracia, lo cual ha sido algo bueno”.

 

Torreblanca hizo mención en su exposición “a nuevas fuerzas políticas que reclaman ir hacia formas de democracia más participativa” a lo que contestó contundente que “tenemos que tener en cuenta que nos estamos alejando más de estas formas de participación, por la globalización, que acercando, y quizá sea mejor cambiar la perspectiva en lugar de volver atrás”.

 

En cuanto a la relación entre España y Europa el profesor de Ciencia Política de la UNED destacó que “es hora de acabar con el sentimiento de que España es el problema y Europa la solución”. “Afortunadamente tenemos los problemas que tenemos y no otros. Problemas usuales de democracias maduras como la nuestra, incluida la corrupción. Y tenemos que trascender de esta idea asignando a cada uno sus responsabilidades, y entendiendo que somos parte de Europa”.

 

Según Torreblanca, “tenemos un sistema político europeo que ha ido cristalizando sin que hayamos prestado mucha atención a cómo mejorar el modelo y la gobernanza europea”. “Al proyecto europeo le ha pasado igual que cuando se te estropea la lavadora: cuando deja de funcionar es cuando empiezas a preocuparte”, sentenciaba el ponente.

 

Torreblanca concluyó su conferencia con la que es la tesis de su último libro: “Estamos en una especie de tierra de nadie, a mitad de camino democrático y sin los instrumentos para completar ese proceso. Hemos creado unas instituciones disfuncionales y con falta de legitimidad democrática. Tenemos algo que parece una ciudadanía, algo que parece un poder legislativo y algo que parece un poder judicial, pero no acaba de encajarnos, y de ahí que no podamos responder a quién gobierna en Europa”. “No sabemos lo que es una democracia supranacional porque no lo hemos hecho nunca, pero es lo que necesitamos”, concluyó.